La semana pasada que fui a hacer algunas compras al super-market Countdown me dediqué a ver con detenimiento algunos de los productos y es inevitable hacer las comparaciones con los precios de mi país. En términos generales acá todo es mucho más caro y no me refiero solo a los productos alimenticios sino también al costo de la vivienda (ya sea rentar o comprar), los servicios como agua, luz, teléfono (línea fija/celular), servicios de internet, transporte público, el petrol (combustible), ropa, electrodomésticos, juegos electrónicos y la lista continúa. Esa es mi perspectiva en estos momentos por la sencilla razón que no tengo un salario fijo. Este mismo pensamiento fue el mismo de muchas de las personas que he conocido cuando estuvieron en mi misma situación, -al principio todo cuesta-, es decir, inicialmente todo se ve super caro, pero las cosas cambian al incorporarse a la fuerza laboral neozelandesa, donde los sueldos andan bastante bien.
Acá les dejo algunas de las fotos que tomé ese día dentro del super-market y el precio de otros productos que he consultado directamente del sitio http://www.countdown.co.nz/ :
